Alimentación después de una cirugía de banda gástrica

Los primeros días después del procedimiento

Inmediatamente después de la cirugía de banda gástrica, usted puede tomar un sorbo de agua de vez en cuando, o chupar un cubito de hielo. No se recomienda ni es necesario beber cantidades mayores, ya que recibirá una perfusión intravenosa de líquido para mantener el nivel apropiado de ingesta de líquido que su cuerpo requiere.

El día después del procedimiento de cirugía bariátrica, usted aumentará su ingesta de líquidos, pero procederá con pequeñas cantidades a la vez. No beba sólo agua: elija una bebida que contenga una cantidad adecuada de calorías. Para prevenir las náuseas y los vómitos, absténgase de beber demasiado.

Las primeras cuatro semanas

Se recomiendan bebidas y alimentos muy blandos durante las primeras cuatro semanas después de la intervención.

  • Caldos o sopas ligeras: no hay caldos espesos ni sopas que contengan verduras o carne.
  • Yogur: yogur de consistencia especialmente líquida y bajo en grasa.
  • Leche: leche descremada preferiblemente.
  • Postres: helado bajo en grasa, pero sólo en porciones pequeñas.
  • Frutas: jugos o frutas blandas como duraznos, plátanos y peras.

 

Durante las primeras cuatro semanas después del procedimiento, usted comerá alimentos (según las recomendaciones del dietista) que no se le permitirá comer una vez que se haya recuperado completamente. La razón de esto es que estos alimentos específicos tienen un número muy elevado de calorías y no son apropiados para una nueva dieta (régimen de pérdida de peso). Además, durante las primeras cuatro a seis semanas después de la cirugía, su proceso de pérdida de peso no comenzará, pero usted permitirá que su nuevo estómago se adapte a este eventual proceso de pérdida de peso.

¿Qué comeré después de estas cuatro semanas?

Después de este período de cuatro semanas, usted comenzará progresivamente a comer sopas de consistencia ligeramente más espesa. Después, podrá proceder gradualmente a comer alimentos más sólidos. Durante esta fase, algunos alimentos siempre pueden causarle problemas, como el pan, la carne roja o el arroz, por ejemplo. Se recomienda comer principalmente carne blanca (aves, ternera) y pescado, ya que estas carnes tienen una consistencia más suave y son más fáciles de digerir. No olvide masticar bien todos los alimentos.

Durante este período, si usted experimenta dificultades con alimentos sólidos y/o tiene náuseas y vómitos, se recomienda que regrese a la dieta de líquidos claros descrita anteriormente. Intentará de nuevo incorporar progresivamente alimentos sólidos después de un período exitoso de ingestión de alimentos blandos. No dude en pedir consejo a su médico o dietista: ellos le darán recomendaciones específicas en función de su situación personal.

Cuando ya no tenga dificultades con los alimentos sólidos, será el momento de prestar mucha atención a su régimen. En este punto, deberá evitar las bebidas altas en calorías. Limite su consumo de líquidos a caldos, té, café (preferiblemente sin azúcar añadida), así como agua mineral. A continuación encontrará una guía general de dietas. Esta guía le ayudará a preparar comidas deliciosas y razonables que contengan los elementos nutricionales adecuados, al mismo tiempo que son bajas en azúcar y grasa.

Diez reglas muy importantes

Las diez reglas importantes que se describen a continuación con respecto a los alimentos, las bebidas y el ejercicio le ayudarán a lograr los resultados más óptimos de pérdida de peso. No olvide: su voluntad de adoptar una nueva forma de comer es de crucial importancia para que este procedimiento sea un proceso exitoso de pérdida de peso.

  • Coma sólo tres comidas pequeñas al día
  • Coma lentamente y mastique bien (mastique aproximadamente de 15 a 20 veces por bocado).
  • Deje de comer tan pronto como se sienta lleno
  • No beba mientras come
  • No comer entre comidas
  • Coma sólo productos frescos
  • Evite los alimentos ricos en fibra
  • Beba lo suficiente durante el día
  • Beba sólo bebidas bajas en calorías
  • Haga al menos 30 minutos de ejercicio al día